“¿Cuántas joyas y relojes de lujo tiene Dina Boluarte? ¿Cuándo y cómo las adquirió? ¿Quién se las regaló y qué buscaba? A estas alturas es imposible sostener que son fruto de su trabajo”.
Dina Boluarte no ha querido explicar el origen de sus relojes Rolex y otras joyas que ha lucido públicamente. Ha evadido y criticado la investigación fiscal. Se victimiza. Dice que es acosada.
Cuando antes le preguntaron sobre el origen de los Rolex, mintió. Boluarte dijo que eran “de antaño”. También declaró que había trabajado toda su vida y que esos bienes eran fruto de sus esfuerzos.
Boluarte debió declarar esas joyas y relojes. A esos bienes hay que sumar pulseras Cartier, según el diario “La República”. El total equivale a medio millón de dólares.
Parece difícil que el Congreso promueva y logre una vacancia por incapacidad moral permanente. No por falta de méritos, sino por exceso de intereses.
El gobierno está blindado con sus alianzas. Hay un entendimiento evidente con APP y César Acuña. Lo mismo, con el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, y su partido Renovación Popular, así como con Fuerza Popular.
López Aliaga dijo en su momento que el Gabinete que presidía Alberto Otárola fue uno de los “mejores que he visto en mi vida”. El Gobierno decidió garantizar una financiación de la Municipalidad Metropolitana de Lima por S/1.400 millones. El MEF negaba el apoyo y después cambió.
Los ministros han salido a defender a la presidenta con argumentos deleznables. Hubo quien dijo que las acusaciones se hacían por ser mujer. Y agregó: “No debemos distraernos con estas denuncias”.
Que los ministros pidan no investigar, callar y minimizar el hecho es vergonzoso e inaceptable. Nos hace pensar que, ante alguna denuncia dentro de alguno de esos ministerios, la respuesta será no investigar.
Este Gabinete de Ministros chicheñó buscará el voto de confianza en el Congreso. Jorge Montoya, congresista de Renovación Popular, ha calificado el allanamiento de la fiscalía como un “atentado” contra la “dignidad presidencial”. Renuncia, de antemano, a su deber de fiscalizar.
La lista de los defensores de los Rolex es amplia como amplios son los beneficios que reciben los aliados del gobierno. Eso no debe amilanar a la opinión pública y a los periodistas a seguir pidiendo explicaciones.
¿Cuántas joyas y relojes de lujo tiene Dina Boluarte? ¿Cuándo y cómo las adquirió? ¿Quién se las regaló y qué buscaba? A estas alturas es imposible sostener que son fruto de su trabajo.
¿Estos relojes Rolex y pulseras Cartier, estos brillantes y estos oros cuánto le han costado al Perú? ¿Cuánto pagaremos por el lujo de Dina Boluarte?
Ella debe responder.
Federico Salazar es periodista