“Así manejan el país. No aman ni defienden la democracia. No actúan por el bien común ni el interés general. Como piratas, solo les interesa su porción del tesoro”.
El Congreso de la República va dando fe de su irresponsable voracidad. Tanto en el manejo económico como en el político. Dos ejemplos resultan útiles para mostrar su accionar.
En el plano político, ayer, el pleno del Congreso aprobó el retorno a la bicameralidad incorporando como contrabando una disposición complementaria derogatoria que dice “se deroga el artículo 90-A de la Constitución Política”. Punto, sin más debate. Este artículo, 90-A, es el que impide la reelección parlamentaria. Una vez más, contaminan la bicameralidad con lo que es su objetivo real: poder reelegirse indefinidamente.
Esta medida, vista por muchos como saludable para el sistema político pues la no reelección no ha generado los beneficios anunciados, al incorporarse como contrabando, sin debate público y sin consulta ciudadana, es de cobardes y le resta legitimidad.
En el plano económico la acción es igual de grave pero menos pública. Estamos ya en el quinto mes consecutivo sin crecimiento en el país, situación no vista desde los 90 y el ministro de Economía reconoce que estamos en recesión. Uno diría que es un momento para dejar de lado los intereses subalternos, pero esto no es lo que vemos en el Parlamento.
El ministro presentó un pedido de crédito suplementario por 5 mil millones de soles que incluía inversiones para hacer frente al fenómeno de El Niño en el marco del Plan Integral de Reconstrucción con Cambios (PIRCC) por 1,500 millones de soles. El detalle de estos proyectos y su costo estaban en el anexo 1 y 2 del proyecto.
En la Comisión de Presupuesto se decidió alterar el proyecto y añadir un anexo 3. Este anexo incorporó 127 proyectos por 550 millones de soles, priorizados únicamente por los congresistas de la comisión y sin criterio técnico evidente. Pero esto no acabó ahí. Al llegar al pleno, el resto de parlamentarios, sin continencia, reclamaron incorporar también algunos de sus proyectos. El anexo 3 terminó aprobando un monto de 826 millones de soles para financiar 158 proyectos por antojo parlamentario, más que por una estrategia de priorización que los justifique.
Tanto movieron el proyecto del MEF que el texto sustitutorio aprobado y ¡publicado! no incluyó los anexos 1 y 2, parte central del paquete del MEF. Poco después se publicó una fe de erratas donde se corrige un artículo y se incorporan los anexos “olvidados” en el debate.
Al ver el detalle se puede ver que el monto para financiar el PIRCC se redujo a solo 500 millones, es decir mil millones menos. Y se pasa de financiar 150 a solo 53 proyectos destinados a hacer frente al fenómeno de El Niño.
Así manejan el país. No aman ni defienden la democracia. No actúan por el bien común ni el interés general. Como piratas, solo les interesa su porción del tesoro.
Fuente: La República – Marisa Glave excongresista