Decisión administrativa del Congreso, declaró procedente pago de pensión vitalicia del expresidente, condenado e indultado Alberto Fujimori. Eduardo Salhuana, dijo en un medio radial, que el pago de la pensión vitalicia no requiere ser vista por Mesa Directiva del Congreso.
Uno no puede sentir más que indignación y rechazó a esta forma de utilizar al Estado para beneficiar con recursos del Estado a una familia. No olvidemos que Keiko Fujimori, la hija del sentenciado expresidente, declaró en juicio por lavado de activos, que el partido Fuerza Popular le paga 14 mil soles mensuales por su condición de presidenta del partido político. De donde provienen los recursos de Fuerza Popular del Estado.
Ahora el indultado padre de Keiko, percibirá 15,600 soles mensuales por concepto de pensión vitalicia.
Diga usted amable lector, si esto no es una evidencia de la descomposición moral de los políticos de turno en nuestro país.
De verdad, es inaceptable que estos hechos sucedan y marquen la historia de nuestro país que en los últimos periodos ha visto desfilar por la cárcel a los que nos gobiernan.
En los años 1990 / 1992 Alberto Fujimori, cerró el Congreso y reformó el Estado para desaparecer la industria nacional, como lo hizo. Fueron miles de trabajadores que fueron despedidos injustamente. No hubo pensión alguna para esos miles de trabajadores despedidos.
La moral política de nuestro país, está en crisis, qué duda cabe. Mientras miles de pensionistas y jubilados reclaman aumento de pensiones. Mientras los gremios laborales reclaman aumento de la remuneración mínima vital, mientras la desnutrición, anemia y tuberculosis afecta a nuestros niños y las ollas comunes se multiplican en Lima Metropolitana, el Poder Político no se inmuta ni sonroja y dispone aumentos de sueldos para la burocracia dorada del país que incluye bonos para los congresistas. En medio de esta espantosa situación social, el Congreso aprueba la pensión vitalicia para Alberto Fujimori. Lo que demuestra que la moral política del país está por los suelos.