“El puerto de Chancay avanza, la ciudad no. Sin planificación, el crecimiento portuario del norte chico corre el riesgo de estancarse”.
Hace un año se inauguró el puerto de Chancay, importante puerta comercial y nodo logístico que conecta Sudamérica con Asia. Las cifras del primer año de operación han superado las expectativas y confirmado su potencial, según el Centro de Estudios sobre China y Asia-Pacífico de la Universidad del Pacífico, se movilizaron 223.000 contenedores, tres millones de toneladas, y 43,6 % de carga en trasbordo, consolidándolo como ‘hub’ regional para Chile, Ecuador y Colombia.
Pero estos auspiciosos resultados se contrastan con la precariedad de su entorno. En la ciudad de Chancay, el 70 % de los hogares no tiene Internet, el 21 % carece de suministro eléctrico, el 39 % no cuenta con alcantarillado y el 30 % no dispone de agua potable. El transporte público es mayoritariamente informal, al igual que gran parte de la ocupación del suelo. A ello se suma que el cruce de la Panamericana Norte sobre el río Chancay se realiza mediante una estructura provisional desde que el puente colapsó a inicios de este año, evidenciando la fragilidad de la infraestructura existente.
La especulación que despierta la presencia del puerto ha acelerado la expansión informal sobre suelos agrícolas y eriazos, ampliando las brechas de servicios y reduciendo la disponibilidad de suelo para usos planificados.
Ante la ausencia de un plan urbano vigente, la municipalidad no tiene una herramienta para reservar áreas para vías, hospitales, colegios, parques y otros equipamientos esenciales. Este desorden territorial también dificulta el desarrollo de parques industriales y centros logísticos que podrían capitalizar la demanda portuaria, afectando la competitividad local y la creación de empleo formal y especializado.
Con el fin de revertir este panorama, el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) impulsó la elaboración del Plan de Acondicionamiento Territorial de Huaral (PAT) y los Planes de Desarrollo Urbano (PDU) de Huaral y Chancay, cuyos estudios comenzaron a inicios del 2024.
Para el caso de Chancay, el PDU la concibe una “Ciudad Puerto”, donde se ha previsto ordenadamente las necesidades de expansión residencial, recreación, equipamientos y servicios, junto a zonas industriales que aprovechen las dinámicas logísticas propias de un puerto y las áreas productivas aledañas. Se ha previsto una expansión urbana de 1.000 ha, 2.500 ha de zonas industriales, 300 ha de nuevas áreas verdes y 10 km de malecón costero. El plan propone incentivar la diversificación económica incentivando actividades logísticas, productivas, turísticas y ecológicas, y presenta una cartera de proyectos que suma S/3.500 millones en inversión.
Los tres planes se concluyeron en noviembre del 2024, pero hasta hoy ninguno ha sido aprobado. El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) y la municipalidad provincial de Huaral –entidad responsable de su validación–, mantiene posiciones divididas con el MVCS y la Municipalidad de Chancay, principalmente en torno al trazado de la vía de evitamiento Chancay–Chancayllo.
El MTC y Huaral insisten en mantener el recorrido actual, que divide en dos el frente costero; mientras que el MVCS y Chancay apoyan la propuesta del PAT y PDU que plantea desviar la vía hacia el este, mejorando la conexión con la ciudad de Huaral y liberando suelo de alto valor urbano y turístico. El desvío no solo dinamizará el desarrollo urbano, sino que generará también una importante sinergia al compartir el mismo eje con el tren de cercanías de Lima–Barranca, que conectará el puerto de Chancay, el futuro Parque Industrial de Ancón y el puerto del Callao.
Como vemos, la falta de articulación entre sectores, niveles de gobierno y actores locales está paralizando la aprobación de instrumentos claves que permitirán transformar la energía económica del puerto en un desarrollo urbano competitivo y sostenible.
Es imprescindible que los titulares de Vivienda y Transportes alineen sus agendas y trabajen de forma conjunta para aprobar e implementar los planes estratégicos hoy detenidos.
El puerto de Chancay avanza, la ciudad no. Sin planificación ni coordinación intergubernamental, el crecimiento portuario del norte chico corre el riesgo de estancarse, desaprovechando una oportunidad histórica de consolidarse como el ‘hub’ más importante del Pacífico sur.
Fuente: El Comercio – Aldo Facho Dede es arquitecto urbanista.
