La Contraloría General de la República advirtió que las ciclovías temporales implementadas por la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) en importantes vías de la capital, carecen de estudios y presentan inconsistencias técnicas, lo que denota una inadecuada planificación.
El Informe de Visita de Control N° 031-2020-OCI/0434-SVC, emitido y publicado por la Contraloría General de la República, revela que la intervención de la MML contempla la ocupación por dos años de un carril dentro de la calzada vehicular para uso exclusivo como “ciclo carril bidireccional” en 11 tramos de vías, pero que posteriormente se redujeron a 10 por un total de 46 kilómetros.
Falta de estudios técnicos
Además señala que la Subgerencia de Transporte Motorizado ha impulsado la implementación de ciclovías sin efectuar los estudios de flujos vehiculares, tránsito y/o transporte, necesarios para sustentar técnicamente su viabilidad y asegurar la no afectación de los niveles de servicio y capacidad de las vías a intervenir, entre otros indicadores.
A modo de ejemplo, dicha afectación quedó evidenciada en la congestión vehicular que se viene generando en la Av. Sánchez Carrión (con sentido a San Miguel), donde hay una ciclovía implementada, lo cual ocasionó que una ambulancia que se dirigía al Hospital Militar haya tenido que invadir el carril contrario para continuar con su tránsito.
Lento avance de implementación de vías
El informe de la Contraloría señala que, a la fecha de emisión del informe, la implementación de ciclovías temporales presentaba un nivel de avance de 28.60%, tomando en cuenta que de las 10 vías seleccionadas solo el tramo Av. Garcilaso de la Vega – Av. Tacna (4.40 km) se ha implementado en su totalidad. Existían cuatro vías cuya implementación oscila entre 40% y 85%, y en otras cinco no se registran avances.
Valores inconsistentes sobre cantidad de viajes
Al respecto, la Comisión de Control verificó que en la determinación de la demanda efectiva para la implementación de ciclovías temporales, la Subgerencia de Transporte No Motorizado consideró valores inconsistentes sobre la cantidad de viajes en bicicletas establecida en el Plan Maestro Urbano para Lima y Callao, además que para la estimación de la población demandante potencial se duplicaron ciertos tramos en el área de influencia de las ciclovías a implementar.
Sobreestimación de demanda
Esto originó una significativa sobrestimación de 17 veces más de la demanda efectiva, considerando los parámetros del Plan Maestro Urbano para Lima y Callao, al estimarse 50 070 viajes, cuando solo correspondían 2664, situación que no se justificaría incluso considerando el contexto actual de la pandemia COVID-19, y se mantiene pese a que se han modificado los tramos de las vías a intervenir.
Riesgos para la seguridad de usuarios
Por otro lado, los auditores verificaron que las ciclovías implementadas en las avenidas Garcilaso de la Vega, Canadá y Sánchez Carrión no cumplen con el ancho libre y área de amortiguamiento mínimo de 2.80 y 0.50 metros, respectivamente, lo que pone en riesgo la seguridad de los usuarios.
Esta situación podría replicarse en los tramos a intervenir en las avenidas Aviación, Angamos y Tomás Marsano, ya que al implementarse una ciclovía bidireccional con el ancho libre y área de amortiguamiento que están establecidos en la propia normativa de la MML para la implementación de ciclovías, se afectaría el ancho disponible para la redistribución de los carriles vehiculares.
Mientras que, en la intersección entre las avenidas Francisco Pizarro con Felipe Arancibia, la ciclovía implementada cambia de ubicación del carril ocupado de izquierda a derecha, sin presentar una demarcación con pintura roja que oriente el cruce del ciclista en dicha intersección.
Estos hechos ponen en riesgo la seguridad de los usuarios e incrementa la probabilidad de accidentes de tránsito debido a las maniobras a las que se verán obligados los ciclistas en las vías que no cumplen con las medidas exigidas por las normas vigentes.
Los resultados del informe, que se encuentra publicado en el portal web de la Contraloría, fueron comunicados a la Municipalidad Metropolitana de Lima para que se adopten las acciones correctivas que correspondan. La entidad ya presentó el respectivo Plan de Acción ante el Órgano de Control Institucional (OCI), y debe ser implementado para corregir las observaciones indicadas en el informe de control.