Dentro de seis semanas, ocho millones de escolares retornarán a las aulas. Por ello, los padres están llamados a preparar a sus hijos integralmente a fin de que esta experiencia sea enriquecedora, segura y agradable para ellos a pesar de las dificultades que pudieran experimentar.
El psicólogo educacional Iván Montes Iturrizaga, docente de la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental, brinda cinco recomendaciones con el fin de que las familias preparen a sus hijos e hijas en este reencuentro que, en estricto, tendría que ser seguro y gratificante desde todo punto de vista
1. Enseñarles a tolerar la frustración
Es importante resaltar que los estudiantes han perdido su ritmo de aprendizaje y ciertos hábitos para el estudio luego de dos años sin acudir a la escuela. De esta manera, es normal que aparezcan algunas dificultades para aprender y es importante que los padres de familia (o cuidadores) transmitan mensajes saludables a sus hijos a fin de que asuman estas tensiones como impases comprensibles, pasajeros y producidos por la falta de exigencias propias de la presencialidad.
2. Empatía: no fueron los únicos afectados
Los maestros y directivos han padecido también los estragos de esta pandemia y por lo tanto, los estudiantes deben asumir que ellos no son los únicos golpeados por esta situación. Es importante tener en cuenta esto puesto que todos deben de congregarse en la escuela con niveles elevados de empatía, con el fin de convertir el retorno a clases presenciales en una experiencia memorable vertebrada por el diálogo, la comprensión y el entendimiento pleno. ¡Los estudiantes deben de comprender que ellos y sus familias no son los únicos afectados!
3. Prepararlos a conducirse con mascarillas
Se debe enseñar a nuestros hijos a que sepan conducirse por los espacios físicos de su escuela con la respectiva mascarilla. Esto implica ayudarlos (“entrenarlos”) ya que con este accesorio pierden algo de visibilidad que los obliga a bajar más la cabeza para percibir objetos, peldaños y desniveles en el piso. El usar correctamente la mascarilla también supone el prevenir accidentes y no solo los contagios.
4. Instarlos a vivir en reencuentro con sus compañeros con responsabilidad
Aquí debemos de instar a niñas y niños a que valoren la cercanía física con sus amigos a pesar de los cuidados que aún se deben de tomar. En este sentido, tenemos que hablarles y asegurarnos que comprendan que es mil veces mejor el tener cerca (así sea a dos metros de distancia) a nuestros compañeros y maestros así no podamos abrazarlos que verlos a través de las pantallas. Se debe de asimilar que en el marco de la actual pandemia el tener un contacto cara a cara constituye el escenario más auspicioso.
5. Ofrecerles la oportunidad para que compartan sus vivencias con nosotros
Como padres, tenemos que garantizar a nuestros hijos las condiciones para que se puedan expresar libremente. Para esto, debemos estar dispuestos a escuchar acerca de sus logros como sus dificultades o preocupaciones sin miedo. Aquí cabría recordar que si no ofrecemos la confianza necesaria nuestros hijos no acudirán a nosotros en la búsqueda de consejo, auxilio o ayuda ante cualquier tensión. Por consiguiente, el reproche, la sanción, el catastrofismo o la exaltación desproporcionada deberán dar paso a un verdadero diálogo con nuestros hijos. ¡Se vienen momentos que pueden ser duros para muchos estudiantes y podemos aprovechar la ocasión para mejorar la relación con ellos!
Finalmente, el docente de la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental sostiene que es trascendental que los padres de familia estrechen la comunicación con las escuelas y ofrezcan su apoyo ante cualquier necesidad. Del mismo modo, mucho ayudará el desplegar un rol propositivo y muy comprometido para con la institución en su conjunto y, en especial, con sus respectivos comités de aula.