México alcanzó los 300.101 fallecidos por coronavirus en medio de una sustancial alza de contagios debido a la variante ómicron y con largas filas en centros públicos y privados para hacerse pruebas de Covid, mientras el Gobierno busca acelerar la vacunación.
El país supera las 2,300 fallecidos por cada millón de habitantes, lejos de las tasas de más de 6,000 registradas en Perú -el país con el índice más alto-, pero con un exceso de mortalidad que lleva a los expertos a coincidir en que la cifra de 300,101 fallecidos se queda corta de la real y se acercaría al medio millón.
Estos datos llegan en un momento de una nueva ola de contagios relacionada con la variante ómicron, que el jueves pasado registró 25,821 nuevas infecciones, la mayor cantidad en un día desde el 18 de agosto.
Si bien esto no se ha visto reflejado en las hospitalizaciones, que apenas llegan al 15% de los casos.
La cantidad de hospitalizados es, para las autoridades sanitarias, la mejor prueba de que la campaña de vacunación ha sido un éxito, aunque esté lejos del avance deseado.
El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador puede presumir de acercarse al 60% de población con dosis completas, aunque esté por detrás de países de su entorno como Brasil (67%), Ecuador (70%), Cuba (85%) y Chile (86%).
Fuente: Andina