La ONU afirma que “El mundo está en riesgo de una hambruna de proporciones bíblicas”
Ante la llamada de alerta alimentaria de parte del director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos (P.M.A.) de la O.N.U., David Beasley, quien ha dicho que: “El mundo está en riesgo de una hambruna de proporciones bíblicas”; el ex viceministro de agricultura Jaime O. Salomón propuso acciones concretas para rescatar el Agro de la situación en la que se encuentra: “Debemos garantizar la seguridad alimentaria de los peruanos, asegurando el funcionamiento de la cadena alimenticia desde el agricultor, garantizándoles la demanda y el pago a valores de mercado y justos, hasta el abastecimiento de alimentos a los ciudadanos para los próximos doce meses”.
Consultado sobre qué medidas deberían aplicarse a fin de enmendar el rumbo en el sector y considerando que las ya adoptadas por el Estado (en los tres niveles de gobierno) no están llegando a todos los agricultores de nuestro país, ha dicho: “Para tal fin, recomiendo qué, cada municipio distrital:
a) Adquirirá la producción directamente de los trabajadores de su zona y a precios de mercado; los cuales multiplicados por la proyección de cosecha de cada cultivo en cada distrito indicarán los importes que cada gobierno local deberá comprar a través de las partidas asignadas en el presupuesto 2020 más el apoyo y supervisión del gobierno central.
b) La mercadería será trasladada a un punto de acopio distrital, para ser limpiada, seleccionada, almacenada y distribuida. Ello se realizará con apoyo del MINAGRI a fin de planificar la futura implementación de plantas de limpieza, selección, tratamiento y empaque; así como de plantas procesadoras para generar valor agregado (néctares con la fruta, quesos con excedentes de leche, entre otros).
c) Se calculará la demanda del distrito a fin que el volumen requerido sea asegurado y distribuido semanalmente a los mercados itinerantes distritales y en los mercadillos de cada barrio. Los excedentes serán trasladados a los puntos de acopio de cada capital de provincia y, hasta la capital del Perú.
Fondos existen.
Tendrían que revisar los 2,500 millones ya asignados al agro y ganadería a través de diversas iniciativas de las diferentes dependencias del Minagri y, los 2,000 millones asignados a través del programa FAE Agro (más la reciente ampliación que duplica el importe inicial).
Los actuales mercados itinerantes (llamados de la chacra a la olla) tienen que ampliar su cobertura a los 1,874 distritos del país y al menos una vez por semana (7,496 por mes). A la fecha el MINAGRI solo ha comprometido 2,100 hasta fin de año.
Deben identificar quien es quien en el agro. Para ello, se requiere revisar la relación de agricultores de cada distrito; para ello jugarán papel importante las agencias agrarias municipales, las que deberán verificar en las diversas bases de datos, como el padrón de agricultores con autorización de riego, la relación de agricultores con posesión de tierras y otras. Así atenderían a los agricultores formales (2 %) e informales (98 %), donde el 46 % ya está en condiciones de pobreza monetaria (por lo que éste trabajo debe ser finamente coordinado con el ministerio de Desarrollo e Inclusión Social).
Se requiere acelerar la asignación de los 150 millones que dirigieron a las comisiones de regantes para la limpieza de canales de riego, considerando que el proceso de siembra de algunos cultivos ya inició hace más de un mes. A través de la cadena alimenticia, se requiere generar apoyo directo (Instituto Nacional Investigación Agraria y demás entidades relacionadas) para la adquisición y entrega de semillas certificadas y de fertilizantes apropiados.
Deberán iniciar el análisis distrital de cultivos y cadenas alimenticias priorizadas, para promover la productividad agrícola en el mediano plazo, integrándolas desde el agricultor hasta el cliente final.
Sabiendo quien es quien en el agro deberán:
a) Planificar el aseguramiento y acceso a recursos básicos: agua, energía y sistemas de protección social, y
b) Promover la asignación de títulos de propiedad a todos los agricultores, a fin que sea el primer paso hacia la formalización y futuro acceso a mejores condiciones en el sistema formal bancario.
Deben promover y facilitar la asociatividad (horizontal y vertical) para mejorar la gestión y organización agraria, tal que de manera colaborativa atiendan el mercado.
Informar a la comunidad agraria nacional sobre los fenómenos climáticos, tal que se preparen ante los eventos cíclicos anuales (heladas en la sierra y fríajes en la selva) y los eventuales (caso fenómeno de la Niña que estaría en nuestras costas en menos de cinco meses).
Deberán dejar de llenar los campos con concreto, salvo que aseguren que la infraestructura está alineada a las cadenas productivas priorizadas por cada distrito y región; es decir, si realmente colaborará con la productividad de los cultivos priorizados por distrito”.
Finalmente, el doctor en administración estratégica, señaló: “Trabajando colegiadamente por el aseguramiento alimentario de los peruanos, podrán generar productividad, consecuente desarrollo y competitividad agrícola nacional, para el bienestar del país. No abandonen a los agricultores, que son la despensa del país. Trabajen por el Perú”.
Escribe: Roberto Rodríguez – periodista