Tras meses de incertidumbre, Alianza Lima finalmente decidió por rescindir el contrato del polémico delantero, luego de haber sido protagonista de múltiples escándalos.
Se acabó la novela, y al parecer, tuvo un final relativamente “feliz”. Pero no ese final feliz que ves en las películas románticas, sino más bien en una de drama y humor negro a lo Martin Scorsese en donde la película puede durar hasta 3 horas en buscar un desenlace adecuado a todo el rollo que se vive dentro de la trama.
Hoy, domingo 14 de junio de 2020 y tras 6 meses de haber pertenecido a las filas de Alianza Lima, el club blanquiazul optó finalmente por rescindir el contrato de Jean Deza. Delantero que desde su retorno a tienda ‘íntima’ se había encontrado en el ojo de una tormenta interminable.
En un año en donde los peruanos y el mundo entero vivimos el azote despiadado de la pandemia de la COVID-19, Alianza vive sus propios tratamientos médicos. Curioso que el despido que muchos hinchas ‘grones’ estaban esperando se haya dado después de que se anunciara de manera ruidosa que el club no iba a pagar las cuotas de su deuda concursal. Como si este factor hubiera sido (en términos paranoicos) el empujoncito final para que el problema deportivo, que venía siendo el epicentro de muchos problemas, comenzara a reestructurarse.
Tras haber caído en el clásico ante Universitario, último partido antes de la casi interminable cuarentena, Pablo Bengoechea dejó el cargo de director técnico y tras un mes de búsqueda, finalmente se llegó a un acuerdo con el chileno Mario Salas, campeón del fútbol peruano con Sporting Cristal tras una campaña prácticamente perfecta y casi impecable. Inmediatamente, una vez conocido al nuevo estratega, se le comentó al sureño acerca del plantel con el que iba a manejar, el cual, venía con más contras que pros y una línea de escándalos de indisciplina en las que resaltaba un nombre en particular: Jean Deza.
Alianza Lima, o al menos quienes manejan el tema de los fichajes dentro del club, eran conscientes de lo que se estaba contratando dentro y fuera de la cancha. Salidas a discotecas, fiestas caseras y otros eventos en los que el alcohol, las controvertidas vedettes y la vida nocturna estarían involucrados volvieron a rodear al delantero cuando se creía que este había alcanzado finalmente su redención de carrera deportiva a los 26 años y luego de un 2019 en donde fue el estandarte de un UTC que consiguió salvarse del descenso. Una timada de aquellas al club victoriano en la que ni siquiera la cuarentena por el coronavirus pudo desprender al jugador de estos escándalos.
No sabemos qué le deparará el destino a Jean Deza. ¿Decidirá seguir ligado al Fútbol? ¿Anunciará un retiro tempranero para dedicarse de lleno a darle de comer a la prensa de espectáculos? Lo que definitivamente se sabe es que, si desea ir por lo primero y retomar una vez más su estabilidad deportiva, tendrá que ir a un club en donde pueda tener la tutela de alguien a lo Samuel L. Jackson en la película “Juego de Honor”.
Escribe: Luis Burranca – reportero