Alcalde Peramás debe rendir cuentas de esta situación antes de dejar sillón municipal
Indignación, es lo que se siente al ver el abandono en que se encuentra este módulo de seguridad ciudadana, construido con dinero de los contribuyentes y que en su oportunidad fuera inaugurado con bombos y platillos, para saciar el ego y protagonismo del alcalde Enrique
Peramás.
Hoy, ese módulo que se ubica en el cruce de la avenida Tarapacá con la entrada a la GUE Ricardo Bentín y la urbanización Totorita es guarida de vagos, alcohólicos y drogadictos.
Desde su interior emana un olor pestilente y nauseabundo, convirtiéndose en un peligroso foco infeccioso considerando que por allí transitan cientos de alumnos bentinianos.
El electo alcalde de las filas de Acción Popular Pedro Rosario debe exigir que se le informe cuánto costó esa obra y porque su situación de abandonó.